Comida para un campeón
El hambre, como bien se sabe, no perdona. Lo hace a uno exaltarse al grado de querer forcejear con el cocinero. El personaje de esta crónica lo hizo… y así le fue. Por Roberto Medina Él era frágil. Si de por sí la estatura no le favorecía, su leve joroba lo hacía parecer más cercano...